El informe más reciente de ComexPerú destaca una preocupante realidad en el panorama laboral del Perú: la mayoría de los departamentos aún no han logrado recuperar los niveles de productividad que tenían antes de la pandemia. Según el informe, 17 de los 24 departamentos del país enfrentan una tendencia decreciente en la productividad laboral desde el año 2020, lo cual está teniendo un impacto negativo significativo en la economía nacional y en el mercado de trabajo.

Uno de los puntos críticos identificados por el gremio es la concentración de la generación de empleo en sectores menos productivos. Actividades como el sector agropecuario, alojamiento y restaurantes, así como el comercio, a pesar de representar el 50.4% de todos los puestos de trabajo, son notablemente menos productivas en comparación con industrias como la minería e hidrocarburos, que, aunque representan una fracción mínima de los empleos totales, exhiben una productividad que supera significativamente el promedio nacional.

Entre los sectores que continúan mostrando niveles bajos de productividad se encuentran la manufactura, pesca, alojamiento y restaurantes, construcción, así como transporte y comunicaciones. Estos sectores son clave en la economía del país y su baja productividad está limitando el crecimiento general.

En términos regionales, mientras que algunos departamentos como Ica han mostrado mejoras en su productividad laboral desde 2019, otros como Tacna han experimentado un deterioro notable. Este último caso se atribuye a un aumento en la fuerza laboral sin un crecimiento económico proporcional, lo que indica desafíos estructurales en la gestión del empleo y la inversión en esas áreas.

En respuesta a estos desafíos, ComexPerú enfatizó la necesidad urgente de incentivar la inversión privada y promover políticas que fomenten la contratación formal. Advierten que políticas populistas recientes, como incrementos en el salario mínimo sin criterios técnicos adecuados, podrían agravar la escasez de empleo de calidad en lugar de resolverla.

En resumen, el informe subraya la urgencia de implementar medidas que impulsen la productividad en sectores clave de la economía peruana, con el objetivo de fortalecer el mercado laboral y fomentar un crecimiento económico sostenido y equitativo a nivel nacional.