El expresidente Alejandro Toledo protagonizó una nueva escena durante su audiencia, en donde pidió piedad y hasta “por favor” ser atendido en una clínica y no por doctores del INPE con un tono de voz al borde del llanto debido a que viene sufriendo depresión y tendría la presión arterial.
“Cumple estrictamente con su tratamiento médico habitual bajo supervisión directa. Asimismo, recibe control periódico por parte del equipo médico tratante y monitoreo continuo por personal profesional de enfermería las 24 horas del día”, se logra leer en un comunicado enviado por el INPE desmintiendo lo dicho por Toledo.